Los proyectos H2SAREA y BENORTH2 de Nortegas entre las iniciativas españolas en preparar la red gasista europea para hidrógeno
El hidrógeno va a constituirse como uno de los principales vectores energéticos para Europa. De modo que el transporte de grandes volúmenes de hidrógeno a través de la infraestructura gasista existente supondría una solución viable y eficiente en costes.
Alineado con ese objetivo se persigue acelerar el proceso de descarbonización europeo a través del desarrollo de la infraestructura de hidrógeno, basada tanto en conducciones nuevas como en la ya existentes. Las propuestas de cara a impulsar la utilización de la red de distribución de gas para el transporte de hidrógeno han tenido su reflejo en España. Según la Comisión Europea es el país europeo con mayor potencial de producción y exportación de este combustible, debido a la estacionalidad del consumo y a la alta cuota de producción renovable.
En un Think Tank para el estudio del hidrógeno inyectado la Red de Gas Natural, impulsado por Sedigas, se puso de manifiesto el buen nivel de infraestructuras gasistas en España, con una amplia red bien mantenida y suficiente mallada que podría transportar el hidrógeno a los puntos de consumo, incluyendo tanto ciclos combinados como industrias, estaciones de recarga o los propios consumidores domésticos. Al mismo tiempo, se constató la necesidad de modificar la legislación en torno a la inyección de hidrógeno de las infraestructuras de gas natural ya que, aunque la normativa actual ya permite un cierto grado de blending, es necesario un desarrollo más amplio.
Dos de los proyectos liderados por Nortegas que buscan hacer frente al desafío que plantea su almacenamiento y distribución son H2SAREA y BENORTH2.
El primero, puesto en marcha en 2021, explora la inyección de este gas renovable en las redes existentes de distribución de gas natural. H2Sarea tiene como objetivo analizar el comportamiento de las infraestructuras y equipos que actualmente utilizan gas natural, tanto en instalaciones domésticas como industriales, una vez éste se encuentra mezclado en diferentes porcentajes crecientes con hidrógeno, y desarrollar nuevas soluciones tecnológicas para la transformación progresiva de la red de distribución. En este sentido, se prevé que el proyecto impulse la I+D de sistemas de inyección de hidrógeno, sistemas de compresión avanzados, desarrollo de fijaciones inteligentes específicas, investigación de nuevos materiales y componentes aptos para su utilización en entornos 100% hidrógeno y en mezclas variables con gas natural, además de sistemas modulares de separación de hidrógeno, sensores o quemadores.
Por su parte, presentado este mismo año, Benorth2, construirá la red de hidrógeno más grande de España, con una longitud superior a 15 kilómetros a lo largo de ocho municipios vizcaínos en su primera fase. La red contempla no solo la elaboración de una mezcla de hidrógeno y gas natural para su uso en la red de gas ciudad, sino también su distribución para usos industriales, de transporte y para la actividad de la central de ciclo combinado del municipio de Amorebieta.
Cuenta con inversión inicial de 50 millones para 20 MW, pero el objetivo es ampliar la capacidad de generación a 200 MW antes de 2030, lo que implicará una inyección total de 300 millones de euros. La principal novedad será avanzar en la elaboración de una mezcla de gas natural e hidrógeno que pueda emplearse en la actual red de distribución.
En una segunda fase se contempla una actividad con electrolizadores de 20 MW, lo que permitirá obtener más de 2.000 toneladas de hidrógeno al año. La producción se repartirá entre la red de consumo de gas a través de la gestión de Nortegas (4,38 toneladas diarias), una turbina que aportará energía a la instalación (0,96 toneladas diarias) y un sistema de distribución para la industria y el transporte (0.14 toneladas diarias).
Link noticia: La red gasista europea se prepara para el hidrógeno - Gas Actual | SEDIGAS - Asociación Española del Gas